Capital cultural y gastronómica del sur
El punto de partida para recorrer los caminos del Mayab.
La capital de Yucatán es el punto de inicio para recorrer y conocer el estado. Fundada en 1542 y construida sobre la antigua ciudad maya de T´ho, se destaca por su extensa oferta de atractivos culturales y artísticos, un centro histórico colonial con influencia arquitectónica europea y un sobresaliente estilo francés que podemos admirar en las casonas del paseo de Montejo, la avenida más importante de la ciudad. Actualmente galardonada como “Mejor ciudad pequeña del mundo” y “Mejor destino de convenciones” por medios especializados en turismo.
La ciudad es el centro de distribución de turismo cultural más importante de la península de Yucatán: con más de 5 mil 919 habitaciones en hoteles de todas sus categorías, recintos de congresos y exposiciones, más de 300 restaurantes de todo tipo de modalidad y una extensa oferta de atracciones culturales y turísticas.
Te ofrece varias opciones de cultura, historia, diversión y su deliciosa gastronomía, por lo que te recomendamos comenzar tu visita en el Centro Histórico de la Ciudad, en donde se puede apreciar gran variedad de edificios coloniales, museos, galerías, teatros, cafés al aire libre, bares, ropa típica, parques, hoteles, restaurantes con comida típica nacional e internacional.
El Centro Histórico es un lugar ideal para llevar a cabo todos los días diferentes actividades de esparcimiento y diversión nocturna.
Destinos principales
Barrio de Mejorada
El Barrio de mejorada, con su Iglesia del siglo XVII, misma que sirvió a lo largo de su historia como un hospital, cárcel de mujeres y cuartel que alberga en la actualidad la Facultad de Arquitectura de la Universidad Autónoma de Yucatán, con su parque, donde se clavó el Primer Riel de Ferrocarril en la Península en 1870, es una parte esencial de la ciudad de Mérida.
En este antiguo barrio también podemos encontrar el Museo de Arte popular en la Casa Molina, el Museo de la Canción Yucateca, los históricos Arco de Dragones y Arco de Puente así como el Centro Cultural del Niño Yucateco y el Museo del Ferrocarril.
Barrio de San Cristóbal
En el bello barrio de San Cristóbal Museo de la Ciudad es un elemento cultural de gran importancia para la ciudad de Mérida, tanto por sus características arquitectónicas como por su valor histórico, ahí se encuentra el Ex Palacio Federal de Correos, el Mercado Lucas de Gálvez, el Mercado de San Benito, el Mercado de Artesanías, Bazar García Rejón.
La hermosa Iglesia de San Cristóbal, bajo la advocación de la Virgen de Guadalupe es sede cada 12 de diciembre de peregrinaciones y procesiones.
Barrio de San Sebastián
Es uno de los más antiguos y de mayor tradición en Mérida; desde tiempos muy antiguos se asentó hacia el suroeste de Mérida un pueblito maya, que al tiempo de la colonización se le nombró San Sebastián.
Hay quienes creen que por él pasó la tropa de Montejo cuando llegó a T'ho. En este tradicional barrio se encuentra la Ermita de Santa Isabel que data del siglo XVII; antiguamente fue llamada como la ermita de nuestra señora del buen viaje, posiblemente por la posición cerca del camino real de Campeche.
Barrio De Santiago
A raíz de la bonanza henequenera que viviera la región hacia finales del siglo XIX, un grupo de potentados yucatecos decidió poner en marcha un proyecto para construir un paseo público que "fuera digno de la ciudad de Mérida" y modernizar a la capital de las postrimerías del siglo XIX.
El hoy llamado Paseo de Montejo, construido entre 1886 y 1905, fue inspirado en los Campos Elíseos de París y nombrado así en homenaje al fundador de la ciudad de Mérida, Francisco de Montejo y León, "El Mozo".
En esta hermosa avenida se encuentran algunos de los monumentos históricos más célebres de la ciudad como las llamadas Casas Gemelas o Casas Cámara, el imponente Palacio Cantón, la Casa Peón del Minarete, la Casa Peón de Regil, la Quinta Montes Molina, los monumentos a Justo Sierra y Felipe Carrillo Puerto, el célebre Monumento a la Patria, uno de los símbolos más importantes de la ciudad, realizado por el maestro colombiano Rómulo Rozo.
Imperdibles
Teatro Peón Contreras
El más antiguo y bello teatro de Mérida lleva el nombre de José Peón Contreras, inmortal poeta novelista, dramaturgo, ensayista, médico y político yucateco, nacido en esta ciudad en 1843 y fallecido en México, D.F. en 1907.
Inspirado en el estilo neoclásico francés, este teatro fue inaugurado el 21 de diciembre de 1908. El proyecto original fue encargado al arquitecto Pío Piacentini, la dirección técnica fue realizada por el arquitecto Enrico Desserti, el croquis y la pintura de la cúpula se debe a Nicolás Allegretti y la fachada del edificio de marcado sabor europeo es obra de Fernando Ceicola. En diciembre de 2008 el teatro celebró 100 años.
Su distribución y fachada recuerdan los grandes teatros europeos de la época. En el centro de la cúpula o domo pende una lámpara de araña cuyos brazos son de cristal cortado iridiscente.
El arco escénico presenta columnas laterales de orden corintio, con las variantes obligadas por los sistemas constructivos y materiales de la región a pesar de que muchos de ellos fueron importados, decorado ricamente en su interior con suficiente amplitud y majestuosidad.
Gran Museo del Mundo Maya
El Gran Museo del Mundo Maya es un espacio cultural moderno y de vanguardia considerado como uno de los más importantes de América Latina. Cuenta con cuatro salas permanentes que exhiben más de 1000 importantes piezas arqueológicas de la cultura Maya.
La conceptualización arquitectónica del edificio está basada en uno de los elementos claves para entender la mística del pueblo maya: el árbol de la ceiba. A partir de este elemento se desarrolla un desplazamiento arquitectónico que abarca estacionamiento, bodegas de tránsito, sala principal de recepción, salas de exhibición permanentes, sala de exhibición temporal, sala de usos múltiples, área de estancia infantil, sala de proyección cinematográfica, terrazas y jardines.
El museo exhibe una magnífica colección de más de 1,160 piezas que permite disfrutar, entre otros ejemplos, textiles, objetos religiosos y diversos enseres que reflejan la vida cotidiana actual de los mayas; grabados, libros y documentos históricos, obras artísticas y religiosas de la época virreinal; acervos de la época prehispánica que incluyen estelas, bajorrelieves y esculturas en piedra; vasijas, ajuares y ofrendas de cerámica, además de adornos y objetos suntuarios de oro, jade y concha.
Las cuatro salas de exposiciones permanentes con que cuenta el Gran Museo del Mundo Maya tienen un alto contenido temático para dar a conocer la arqueología, antropología, etnología e historia y costumbres del mundo maya en la región.
Museo Casa Montejo
La Casa de Montejo, edificada entre 1542 y 1549 por órdenes de Don Francisco de Montejo, conquistador de la Península de Yucatán, es uno de los muy escasos ejemplos que existen en el continente americano de construcciones civiles del estilo renacimiento conocido como plateresco. Conserva la fachada del siglo XVI, que es una obra maestra de ese estilo artístico. Es una de las cinco Casas Señoriales Banamex, ofrecidas al público por parte del Banco Nacional de México. Estas casas son espacios histórico-culturales que tienen como propósito contribuir al desarrollo cultural, social, ecológico y educativo de nuestro país.
El Museo Casa Montejo tiene cuatro salas permanentes como museo de sitio: el despacho-biblioteca, la estancia, la recámara y el comedor, ambientadas al estilo del último cuarto del siglo XIX y primer cuarto del siglo XX en México. Cuenta además con tres salas de exposiciones temporales en las que se presentarán exposiciones temporales que permitan la apreciación artística, así como un programa de conferencias, conciertos y la obra de los Grandes Maestros del Arte Popular.
Dzibilchaltún
Considerada una de las ciudades mayas más antiguas, cuyo nombre significa “el lugar donde hay escritura en las piedras planas”. Dzibilchaltún reúne en un solo sitio a una ciudad prehispánica, un parque eco-arqueológico y el Museo del Pueblo Maya, que alberga vestigios mayas y españoles, desde objetos de barro hasta pinturas, armaduras y armas españolas, varias estelas mayas, piedras y dinteles tallados en excelentes condiciones.
Dzibilchaltún también cuenta con una capilla franciscana del siglo XVI, que se encuentra justo al centro de la ciudad maya.
Dzibilchaltún se ubica en el kilómetro 14 de la Carretera Mérida- Progreso. Puede ser visitada todos los días a partir de las 8:00 y hasta las 17:00 hrs.
La ciudad conserva 12 sacbés (sak bé oob) o caminos blancos, la mayoría de los cuales parten del centro y se dirigen hacia las construcciones de la periferia; uno de ellos conduce al cenote Xlakáh, que en maya significa "pueblo viejo", uno de los más grandes y profundos encontrados hasta hoy día en Yucatán, y del cual se han rescatado gran número de piezas arqueológicas, principalmente vasijas.
Xlacah es una especie de estanque natural al aire libre y es de sencillo acceso, al estar al nivel de tierra. Sus aguas cristalinas cubiertas de lirios que flotan en la superficie han sido testigos eternos de la grandeza de este lugar, cobrando inigualable belleza al ser a travesadas por los rayos del sol.
El Museo del Pueblo Maya esta conformado por 4 salas de exhibición:
La pérgola de los Monolitos: donde se exhiben esculturas prehispánicas monolíticas de Yucatán, Campeche y Quintana Roo a la vera de un sendero que recorre a través de un jardín de plantas nativas.
La Sala de Arqueología Maya: dedicada a la época prehispánica, en ella se exhiben elementos cerá-
micos y arquitectónicos procedentes de Chiapas, Campeche y del propio Yucatán arreglados a manera de ilustrar temas como el concepto maya del universo, el surgimiento del hombre, la relación hombre-naturaleza, los dioses, la estratificación social, la pintura, la escritura, la especialización en el trabajo y la cuenta del tiempo.
La Sala de Historia: donde se dedica un espacio especial a la Arqueología de Dzibilchaltún, al Contacto y Conquista del Pueblo Maya y la formación de la identidad Yucateca.
El Solar Maya: un área anexa en la que se edificó una vivienda típica del ámbito rural maya, elaborada utilizando técnicas, materiales y mano de obra tradicional.
Llamado así por una ofrenda que se encontró en su interior de siete figuras de barro con forma humana.
El fenómeno arqueo-astronómico del equinoccio ocurre en Dzibilchaltún, los días 21 de marzo y 21 de septiembre, al amanecer, cuando la puerta del Templo de las Siete Muñecas se ilumina con el resplandor del Sol que aparece en el horizonte y, en un momento dado, el disco celeste queda al centro de la puerta y crea un espectáculo de luz y sombra en la fachada poniente.
Estos días, se puede observar la increíble precisión de la astronomía maya integrada a su arquitectura. Los mayas utilizaban el sol como base para la planeación de sus vidas debido a que dependían de la agricultura. Con el equinoccio de primavera iniciaban la siembra y con el equinoccio de otoño la cosecha.